Intuía que entre ellas había cierta química y las invité a fotografiarlas en mi depto de Punta del Este.
Las puse en la cama, y ellas comprendieron.
Esos momentos inciales fueron maravillosos por lo tensos. Si empezaban a besarse estaba dispuesta a azotarlas y molerlas a golpes.
Fue Karina la que comenzó. Estaba segura de que ella no me fallaría. Moría por verlas desnudas entremezclando sus cuerpos.
Esto era lo que yo quería: que se demostraran cariño. Me mojaba toda, pero me concentré en las fotos.
Y sí, comenzó el sexo.
Daniela me miró, excitada y medio avergonzada. Era evidente que lo que Karina le hacía la volvía loca de placer.
¿Por qué me miraba esa pendeja? ¿Me deseaba? Nooo, no podía ahora, tenía que dejar grabado este momento sublime.
Moría por desnudarme y comenzar a masturbarme delante de ellas, pero hubiese cortado el clima que ellas creaban. Ni idea tenían de que yo quería follármelas a las dos juntas...
Daniela era muy puta, me calentaba a propósito...
Las tetas de Daniela eran increíbles, quise mordérselas, chupárselas, arrancárselas. Eso es mi putita, desnudá a Karina que me derrito por verle las tetas...
Esta imagen no es real. ¿Cuántas veces puedes ver a dos diosas jóvenes perfectas darse este sutil amor sexual?
Le alcancé un dildo a Karina. Lo incorporaron rápidamente.
Le hubiese entrado por el culo ahí mismo a Danielita, pero aún no era el momento.
Gemían como ángeles, ¡escuchaba a los ángeles gemir!
Tuve la fortuna de ver las cosas más bellas que puede dar la vida.
Éste es un caso: dos mujeres jóvenes y bellas amándose en una cama.

Me desnudé, ellas se incomodaron, se pusieron serias.
Me coloqué el pene postizo y se incorporaron. Daniela me dijo que no podía hacer eso. La tomé del pelo y la abofeteé varias veces. La tiré en la cama boca abajo y la violé por el culo.
Karina presenció todo sentada en el borde de la cama, lloriqueando.
Daniela chilló como una cerda.
Con una mirada le ordené a Kari que me besara. Ella accedió enseguida, y me besó como una diosa mientras me follaba a su novia.
Cuando acabé con Daniela me la follé por delante a Karina.
Enseguida estábamos las tres entrelazadas en un sexo feroz. Logré que ambas me amaran y obedecieran todos mis caprichos. Las obligué a hacer cosas muy puercas.
Una vez por semana me las llevaba a la cama. Ellas fueron de las cosas más maravillosas que me sucedieron en la vida.
Madame Marie
Me coloqué el pene postizo y se incorporaron. Daniela me dijo que no podía hacer eso. La tomé del pelo y la abofeteé varias veces. La tiré en la cama boca abajo y la violé por el culo.
Karina presenció todo sentada en el borde de la cama, lloriqueando.
Daniela chilló como una cerda.
Con una mirada le ordené a Kari que me besara. Ella accedió enseguida, y me besó como una diosa mientras me follaba a su novia.
Cuando acabé con Daniela me la follé por delante a Karina.
Enseguida estábamos las tres entrelazadas en un sexo feroz. Logré que ambas me amaran y obedecieran todos mis caprichos. Las obligué a hacer cosas muy puercas.
Una vez por semana me las llevaba a la cama. Ellas fueron de las cosas más maravillosas que me sucedieron en la vida.
Madame Marie